Una probable destrucción de vestigios paleontológicos se está perpetrando en el predio El Pocito, posesión que por décadas estuvo a favor de un anciano maya, quien fue víctima de un despojo por un desarrollador inmobiliario en las inmediaciones de Puerto Aventuras.
Fabiola Cortés Miranda, representante legal de la persona despojada, dio a conocer que el proyecto denominado “Amares” no cuenta con ningún tipo de permiso, tras una búsqueda de información.
Con base en evidencias fotográficas, se ha podido corroborar que en el lugar se han encontrado restos óseos de animales de pasadas eras geológicas, los cuales ahora corren el riesgo de desaparecer.
“Se tiene identificado toda la fauna en toda esa zona, David Mayor ha hecho hallazgos paleontológicos de los que estamos haciendo referencia. Es a partir de que se empieza a hacer público este asunto que ellos me aportan esta información y por la cual solicitamos ahora un amparo. Este desarrollo Amares no cuenta con permisos federales, solicitamos a la Semarnat el permiso y no nos la dieron, tampoco tiene permisos estatales y municipales”, dijo Cortés Miranda.
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En el lugar, los investigadores que, incluso han participado en la defensa de la selva contra el Tren Maya, dieron a conocer tal menoscabo de la riqueza cultural y científica de México.
La abogada tramitó una demanda de amparo en un juzgado federal de Cancún contra la falta de acción de las autoridades locales de acudir a verificar el sitio. Hasta ahora, no se ha admitido el recurso.
El proyectos “Amares”, de acuerdo con documentos a los que se ha tenido acceso, se desarrolla sobre el predio El Pocito que por años estuvo bajo la posesión del señor Roberto Chan Puc.
El afectado, junto con su familia, llegó hace más de cinco décadas al lugar y tomó posesión del sitio, bajo las reglas del derecho agrario que así lo permite. Sin embargo, los predios comenzaron a tomar relevancia con el desarrollo turístico.
