Mientras el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguraba el primer tramo del Tren Maya, saliendo desde San Francisco de Campeche hacia Cancún, los activistas del movimiento #SelvamedeTren aacusaron que la infraestructura federal se activó mediante un evento demagogo que no le servirá a la población para ir a sus trabajos o la escuela; que es caro, impacta ilegalmente la selva, rellenando de cemento cenotes y ríos subterráneos, sin ningún estudio.
Recalcaron que en el mismo sentido que el primero posicionamiento público que realizaron en abril del 2022, la megaobra ferroviaria se encuentra “a medias”, sin instalaciones terminadas, sin caternarias eléctricas, sin escuchar a las comunidades, sin importar la justicia social, el impacto al medio ambiente y en particular al agua.
“Mienten, el tren no cuida la naturaleza, por ello recurrieron a decretos ilegales para imponer- lo: las manifestaciones de impacto ambiental, los cambios de uso de suelo, las expropiacio- nes y muchas otras decisiones se manipularon a la voluntad del proyecto, no por la protec- ción de los recursos naturales o de sus habitantes. Mienten, no eran acahuales, eran árboles que prometieron no talar, y devastaron 10 millones solamente en el tramo 5”, subrayan en el comunicado.
Además sostienen que el tren es de un perfil militar, que acentúa la discriminación y exclusión hacia los pueblos indígenas, porque es un proyecto que ha sido impuesto a la fuerza, y que ya está teniendo repercusiones en la vida de los pueblos.
“Sí, el sureste tiene grandes necesidades, pero éstas deben de ser atendidas de manera pun- tual, inteligente, correcta, legal y preservando el medio ambiente. Un proyecto así no es un legado, es un GRAVE PROBLEMA para la vida en la Península”, finalizan los ambientalistas de #SelvamedelTren.