Durante la última semana del 2021 se ha vuelto a registrar el atropellamiento de un gran felino en Quintana Roo; fue el caso de un puma que fue golpeado en la zona sur de la carretera federal 307, y aunque especialistas señalan que no son constantes, subrayan que cada ejemplar que se pierde es un eslabón menos en la cadena del equilibrio natural de la selva quintanarroense.
Mario Build, presidente del Comité de Protección y Conservación del Jaguar, añadió que la falta de pasos de fauna y la escasa conciencia de los automovilistas para evitar éste tipo de accidentes, suman un verdadero problema para los felinos de la zona, dado que existen casos en que solo quedan heridos y sin atención, con un saldo de muertes furtivas.
Tal escenario preocupa a los especialistas del cuidado animal, dado que con dicha tendencia, en 20 años habría un riesgo inminente de perder al Jaguar, “especie paraguas” de todo el sureste y declarada en peligro de extinción desde 1987.
Sin embargo, para Mario Build, por contrario que parezca, el proyecto del Tren Maya pudiera ser de ayuda para al desplazamiento de los felinos y otras especies, si se concretan en la obra distintos pasos de fauna, básicos para evitar la pérdida de ejemplares, principalmente por atropellamientos impredecibles.
“Si se hace como debe de ser, el tren maya es un buen proyecto, porque hay que verlo en la parte científica y la parte filosófica, uno puede decir desde la parte filosófica que el tren maya es un ecocidio y todo eso, pero eso es algo que solo se puede pensar y, está la parte científica, en donde un científico no puede decir que el tren Maya es un ecocidio porque estaría fuera de sus cabales, entonces el tren maya trae buenas expectativas porque se puede aprovechar para ver todos estos problemas que tenemos como hacer los pasos fauna que se necesitan mucho en las carreteras, con el tren se van a poder agrandar las zonas naturales protegidas, eso también se va a hacer gracias al tren maya”, añadió Buil.